Transcribo la columna completa de Cecilia Blume, Al Toro por las Astas, que publica el diario Correo de hoy: "Seguimos esperando…." Los subrayados son nuestros. Cabe preguntar si todas las contradicciones acá señaladas justifican los actos vandálicos y las amenazas a las autoridades competentes...
El dirigente aymara Walter Aduviri, "asilado" en un canal de televisión evitando su detención, brinda una imagen preocupante que nos debe llevar a reflexionar sobre la ley, su cumplimiento y el chantaje en nuestro país.
En 1996 el Ejecutivo declaró zona reservada a Aymara -Lupaca impidiéndose en dicha zona actividades económicas como la minería. En el 2004 las comunidades de la zona y sus alcaldes, faltos de empleo, solicitaron se levante la reserva para permitir la reactivación de actividades económicas, incluyendo la minería.
En agosto de 2009, se levanta la zona reservada Aymara-Lupaca y el diario puneño "Los Andes" reseña que el presidente del Comitè de Lucha contra la Reserva era Walter Aduviri desde 2006.
A inicios de 2011 con actividad minera en proceso a través del proyecto Santa Ana de capitales canadiense, el mismo Aduviri protesta contra el proyecto, buscando erradicar la minería, a pesar de haberse realizado más de 140 talleres informativos, estar en proceso de adquisición de tierras y obtención del EIA. NO había actividad minera alguna y dado que aún falta por obtener el 80% las tierras para el proyecto, si Puno no quiere minería puede no vender las tierras y listo.
Buscando suspender la minería en el sur de Puno, antes de las elecciones, Aduviri lidera protestas que llevan a destrozos y terror. Por ello el Juez penal de Puno solicita, a pedido de la fiscalía, mandato de detención preliminar otorgado por el juez el 9 de junio, mandato que no se notifica previamente por el obvio peligro de fuga. Y cuando el 13 de junio, Aduviri se presenta en televisión en Lima la Policìa busca cumplir el mandato deteniéndolo. Aduviri y sus abogados alegan que no se le ha notificado la investigación en curso.
Sabemos (i)que hasta el 2009 Aduviri impulsó el levantamiento de la reserva Aymara-Lupaca, para permitir actividades como minería; (ii) que luego Aduviri lideró las movilizaciones en Puno contra la minería destruyéndose bienes públicos y privados lo que configura delito; (iii) que Aduviri tenía desde el 9 de junio mandato de detención preliminar que no se notifica por peligro de fuga; (iv) que se refugia en un canal de televisión en Lima donde la Fiscalía de Puno-extrañamente- le toma su manifestación; (v) que se le revoca el mandato de detención; (vi) que Aduviri ha logrado mucho de esto chantajeando al Estado anunciando muertes en Puno si era detenido.
César San Martín nos debe explicar este caso que esperemos no se constituya en precedente para la justicia. Los ciudadanos merecemos se nos aclare lo sucedido considerando el respeto y la igualdad ante la ley. Hasta hoy no es claro lo que pasó y explicarlo podría servir para que no se repitan estos casos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario