La derrota de la selección de Perú ante su similar de Paraguay me parece una excelente excusa para no volver a convocar a los jugadores que traen del extranjero y darles la oportunidad a muchachos jóvenes y comprometidos, con ganas de hacer bien las cosas y no vivir de figuretismos ni engreimientos. Solo falta terminar con las argollas.
El sufrido hincha tiene gran parte de la culpa, pues endiosan a unos cuantos vividores y respiran en su burbuja de falsas expectativas hasta que la cruda realidad les explota en la cara. Convénzanse, son unos ineptos. A este paso no van a ir a un Mundial nunca, porque no se lo merecen.
Si los fantásticos quieren venir, que lo hagan con su dinero y de vacaciones, sin periodistas adulones alrededor...
El fútbol no es el único deporte importante, hay otros que merecen más apoyo, las artes marciales, el tenis de campo y de mesa, el atletismo en sus distintas ramas, y el ajedrez, ¿quedó claro?
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